El pasado día 19 de agosto hicimos una excursión de travesía desde el Valle de Barrabés al Valle de Arán por el puerto de Viella.
Fuimos un variopinto grupo de 11: Jesús y Paloma, Alicia, Adela, Ángel, Charo (de León) y Antonio,- su marido- Miguel (de Málaga), Josep - sobrino de Ángel y guía del grupo-, Josep María y yo, Pepa.
Comenzamos la ascensión de 840 metros por la cara sur del tunel de Viella, a las 9.50h. El camino es bastante empinado, pasamos el Prá de la Espona, donde había un gran rebaño de ovejas. Íbamos viendo el valle de Barrabés. LLegamos a la cima del puerto de Viella a las 13h. y los más valientes subieron al pico (2.605m.), los otros cinco- Ángel, Adela, Charo, Antonio y yo nos quedamos descansando.
Las vistas eran impresionantes: El Aneto y su glaciar, la Maladeta...y en frente los picos Montardo y Besiberri y el Estanh Redón.Comimos bocatas preparados con el pan y salchichón que Josep María había cargado en su mochila, y echamos un trago del vino de Antonio. Charo, Antonio y Miguel son amigos de Carmen Badía. Charo es vegeteriana y sabe mucho de dietética. Miguel es un montañero de altura, ha hecho Los Carros de Fuego - 50 kms de recorrido y 9.000 metros de desnivel (contando todos los picos), yendo de refugio en refugio, 9 en total. También hace bicicleta y escribe poesía, ¡ahí es nada!
El descenso, de unos 1.000 metros, fué algo duro, , íbamos con cuidado porque se resienten las rodillas, pero había tramos suaves, pasamos por un riachuelo y un bosquecillo de abetos y las flores nos alegraban la vista. Jesús conoce los nombres de algunas como la flor árnica y a mí me encantó el tono fucsia de la dianthus deltoides y el abundante brezo que crece entre las rocas.
Llegamos cansados y sedientos pero felices de haber podido hacer la travesía.
Gracias Josep por guiarnos tan bien y enhorabuena a tí y a Carmen por vuestra reciente paternidad. La pequeña Neus es una preciosidad.
Muy bonitas las fotografias. Como estuve en esa excursión y la vivi muy intensamente, sobre todo en el descenso que mi pobre rodilla izquierda ya no funcionaba. Recuerdo con cariño a Charo que me ayudo con su energia a subir los 850 y bajar los 900 0 1.000 metros, y despues me estuvo dando un masaje en dicha rodilla , me puso un bendaje con mucho amor, Disfrutamos mucho de ese día.Jose María nos ayudo muchisimo es un guia excepcional, paciente y muy eficaz en la montaña. Recuerdo cuando saco el fuet de su pueblo....¡que rico nos supo¡.
ResponderEliminarGracias Pepa por tu cronica, como siempre muy buena.
Un abrazo y un recuerdo cariñoso para todos y en especial a Miguel que nos recito unas poesias suyas con mucho corazón, ¡que bonito es conocer gente así, sencilla y tan llena por dentro¡